sábado, 4 de septiembre de 2010

El Bicentenario.

El Bicentenario, una oportunidad para recordar nuestra identidad católica
Es una oportunidad para escarbar en el corazón de nuestros héroes y descubrir en ellos sus convicciones cristianas
Autor: Lucrecia Rego de Planas Fuente: Catholic.net

Todos los mexicanos que nacimos después de 1917 estudiamos, en los libros de texto gratuitos, una Historia de México falseada, mutilada y maquillada por los gobiernos masones que tuvimos.

Cualquiera de nosotros podrá recordar decenas de páginas dedicadas a exaltar las culturas indígenas, de tal manera que casi llegábamos a creer que sus dioses paganos eran buenos y que era muy sano extraer corazones humanos para procurar la lluvia y la fertilidad; luego, estos mismos textos nos hablaban de una conquista cruel y sangrienta, siempre presentada como “el enemigo” que vino a destruir todo lo bueno que los indios tenían.

También podemos recordar la poquísima importancia que en estos textos se daba a la época virreinal y colonial (300 largos años de historia a los que se le dedicaban dos o tres páginas cuando mucho), donde se pasaban de largo todas las buenas acciones de los evangelizadores. Y después la lucha de independencia, presentada siempre como la liberación de las ataduras que nos habían impuesto los malvados invasores.

Jamás, en estos libros, se aclaraba que las grandes culturas indígenas habían desaparecido muchísimos años antes de que los españoles llegaran acá. Jamás se nos hablaba (en más de dos renglones) de la gran obra que realizó la Iglesia en la época de la conquista y de la colonia (alfabetización, construcción de escuelas, hospitales, talleres, imprentas, universidades). Tampoco se nos hicieron ver las razones religiosas (profundamente cristianas) que motivaron el movimiento independiente. Se nos decía, sí, que una de las causas habían sido las ideas de la Revolución francesa, pero jamás se nos aclaró que el movimiento estuvo motivado justamente para no dejar que esas ideas de la masonería destruyeran la fe del pueblo mexicano.
Iturbide, el verdadero libertador, quien logró la Independencia poniendo a la Religión católica como una de las tres garantías de nuestro pueblo, pasa casi desapercibido.

Nuestros libros de texto de Historia no hablaban del fenómeno guadalupano, ni de las consecuencias culturales de la expulsión de los jesuitas de nuestro territorio y mucho menos de las guerras cristeras, que son ejemplo claro de cómo el pueblo mexicano se opuso con valentía al arrebato de sus convicciones más intimas.

Ahora se nos presenta la celebración del Bicentenario de la Independencia como una oportunidad única para que los católicos podamos conocer la verdadera historia de nuestra nación sin maquillajes jacobinos. Es una oportunidad para escarbar en el corazón de nuestros héroes y descubrir ahí las razones, fundamentalmente religiosas, que los motivaron en cada una de sus acciones. Una oportunidad para recuperar nuestra identidad mexicana, formada por la síntesis perfecta de la cultura indígena enriquecida con los valores cristianos.

Nuestros obispos han realizado varias jornadas con historiadores e intelectuales a lo largo de este año, para conocer la verdadera historia de nuestro país y purificarla de los mitos creados por la masonería.

Es por eso que en Catholic.net hemos publicado un “Especial del Bicentenario” para dar luz a estas magníficas ponencias en las cuales se analiza la historia a la luz de la fe y a las Cartas pastorales que nuestros obispos han publicado con motivo del Bicentenario.

Que todo sea para mayor gloria de Dios.

Lucrecia Rego de Planas
Dirección
Catholic.net

1 comentario:

  1. Gracias por el interés que muestra en develar el verdadero sentido de la lucha por la libertad de mi país.
    Estuve tratando de entrar a los links para leer la información pero por desgracia no he logrado entrar.
    Me podría indicar en que otra página puedo leerlo?

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